Equilibrada, símbolo del esfuerzo colectivo y una seña de identidad para el barrio de Las Chumberas, en Tenerife. Después de más de 15 años de trabajo, esta iglesia consigue el título de Mejor Edificio del Mundo. Su estética sobria se aleja de la imagen clásica cargada de elementos. Muros grises, con una fachada minimalista que se centra en resaltar su material: hormigón visto y piedra volcánica. Una obra premiada por cómo el arquitecto juega con la luz para moldear la calidad y la naturaleza de los espacios interiores. Esa innovación deja imágenes espectaculares, como el color frío de la piedra volviéndose cálido a los ojos cuando entra un rayo de sol. La identidad de una comunidad reconocida ahora a nivel mundial.