El Palacio de la Granja, en Segovia, recibe al visitante con imágenes de cuento, pero el gran tesoro lo guarda en sus jardines. Un total de 26 fuentes, esculturas monumentales representando seres mitológicos o historias. Cada primavera vuelven a ver brotar agua en su interior. Como si de magia se tratase… La fuente del Canastillo emula ese mismo objetivo y la Fuente de las Ranas muestra la historia de Júpiter y Apolo. Su origen está aquí, en lo que llaman el Mar de la Granja, un estanque en la parte alta que acumula el agua del deshielo de las montañas. Algunos lo aprovechan para darse el primer chapuzón del año. Otros lo comparan incluso con fuegos artificiales. El encendido de las fuentes del Palacio de La Granja reúne a más de 60.000 personas en cada temporada y se convierte en un espectáculo para los sentidos, digno de ver y escuchar.

-Redacción-