Esta tarde de sábado ha concluido el primer Vía Crucis del año por las calles de Sevilla: el del Cristo de la Buena Muerte de la hermandad de la Hiniesta. Con la compañía de cientos de personas, la solemnidad de la música de capilla, el incienso y la proclamación de las 14 estaciones de la Pasión han sido protagonistas en torno a la imagen del crucificado. Se trata del Vía Crucis más antiguo que se celebra en la ciudad de forma continuada, desde 1963, y ha sido, en esta primera tarde de febrero, el preludio de muchos otros que se irán multiplicando conforme se acerque la Semana Santa.

-Redacción-