El último informe elaborado por Cáritas no deja dudas, el principal problema de las familias trabajadoras es el precio de la vivienda. Según Cáritas, las familias más vulnerables atraviesan una dramática situación por los altos precios del alquiler y el imposible acceso a la compra de una vivienda.

El 44% de las personas atendidas por Cáritas tiene graves dificultades para hacer frente al pago de la vivienda, y el 25% vive en habitaciones realquiladas. Este último porcentaje ha crecido en los últimos años, registrando una subida del 5% solo en 2024

Es el caso de Vanessa. Tiene 35 años, trabaja desde hace 10 años en una empresa de limpieza, tiene 3 hijos y, con su salario, apenas llega a los 1200 euros al mes. Se considera una trabajadora pobre. Dice Vanessa que se levanta a las 5:30 de la mañana para llegar al trabajo a las 6, termina su labor y va hasta el comedor social de ASAEC, en Málaga, para recoger la comida para ella y sus hijos.

Pagando el alquiler del piso, la luz, el agua, los gastos de comunidad... "me quedan 300 euros como mucho para todo el mes, si no fuera por esta asociación, no puedo darles de comer a mis hijos. No hay forma de estirar el sueldo"

Marisol tiene que compartir piso, no le llega el sueldo, trabaja de limpiadora y la vivienda es lo que más se come de su salario. Al igual que Vanessa y otras tantas personas, tiene que recurrir a la prestación social de asociaciones para poder llevar un plato de comida a casa. "No me alcanza, dice esta mujer".

DESCRIPCIÓN DE IMÁGENES

1. RECURSOS DEL ECONOMATO SOCIAL
2. TOTALES DE VANESSA, MADRE DE FAMILIA VULNERABLE
3. TOTALES DE MARISOL, PERSONA VULNERABLE