Las camareras de piso piden reducir la jornada laboral a 32 horas a partir de los 58 años de edad. El sector ha logrado que una gran cadena hotelera de baleares haya sido la primera en reconocerlo.

Maite López, camarera de pisos, pertenece al Sindicato Kellys Andalucía (SKA). Ella lleva 14 años en la profesión, pero desde hace más de un año está de baja por una epicondulitis en el codo, algo que no le han reconocido como enfermedad laboral. Además tiene mal la espalda junto a otras dolencias.

Lo de Mallorca es un avance importante ya que no les dan una jubilación anticipada sin impedimentos. Por lo menos que lleguen a la jubilación siendo personas. Estamos luchando por un ratio legal, porque se les reconozcan enfermedades...

El trabajo es físico y mental, un trabajo que las deja en un estado complicado. Somos personas y nos estamos rompiendo por culpa de ellos. Las condiciones que nos imponen traen muchas consecuencias en todos los sentidos. Por no cumplir el ratio vienen las represalias, no te dejan ni ir al baño ni beber agua.

DESCRIPCIÓN DE IMÁGENES

1. RECURSOS DE LA ENTREVISTA
2. TOTAL MAITE LÓPEZ, SINDICATO KELLYS ANDALUCIA