La convivencia del hombre con la naturaleza no siempre se da en equilibrio. A menudo, la presencia humana deja dañado el entorno, perjudicando a la biodiversidad. Es lo que ocurre con el río Dílar, en Dúrcal. Las asociaciones de ecologistas han llegado a contabilizar hasta 400 coches en la zona de aparcamiento durante un sábado o un domingo. Son unas 1.600 personas que modifican la zona del río.

Ecologistas aseguran que las riberas han perdido la vegetación autóctona, y una trucha autóctona que estaba en peligro de extinción ha desaparecido totalmente del río Dilar. Las personas han construido piscinas artificiales y eso hace que las truchas no puedan bajar a la zona baja del río.

De tanto pisar por las riberas del río, estas han perdido la vegetación. Por eso, desde Ecologistas en Acción, piden que se regule de alguna forma los accesos al río Dilar, que forma parte del Parque Natural y Nacional de Sierra Nevada.

DESCRIPCIÓN DE IMÁGENES

1. RECURSOS DEL RÍO
2. RECURSOS DE FAMILIAS Y DE BASURA
3. TOTALES DE MIGUEL ESCRIBANO. PORTAVOZ ECOLOGISTAS EN ACCIÓN GRANADA
4. TOTALES DE VISITANTES