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Ha sido la gran anécdota de la jornada durante el Sorteo Extraordinario de lotería de Navidad y lleva corriendo como la pólvora por redes sociales y foros en internet durante todo el domingo. Un momento previo al sorteo que ha inducido a mucha gente a pensar que podría haber “tongo”. Y todo por un pequeño gesto, casi imperceptible, en el que el encargado de meter las bolas en el bombo parece que aprovecha el momento para introducir algo más. Eran los últimos preparativos del sorteo. Las bolas, como protagonistas. Con toda la pompa, comienza la ceremonia con los números. Se revisan meticulosamente, tabla a tabla. Luego, se pasan de los alambres a una semiesfera para, en volandas, introducirlas en el gran bombo. Eso, en dos tandas. Y, por último, los premios. Aunque lo que se está haciendo viral no es el 26.590, agraciado con 400.000 euros al décimo. Algo que puede empañar el sorteo. El encargado del bombo coloca la mano en el orificio y la abre. La sensación, casi una evidencia, es que ha soltado algo, que ha metido algo en el bombo. Y sí, a cámara lenta se ve una pequeña sombra que cae. Las imágenes dan, como poco, que pensar. La polémica está servida y las explicaciones tampoco ayudan. La primera que se difunde, también en Internet, que es una tradición desde 1814: meter unos granos de arroz para dar suerte por un incendio. Verosímil, pero falso. Aunque tal es el revuelo, que Loterías y Apuestas del Estado ha tenido que emitir una nota aclaratoria. Que es una bola que se había salido y que se introduce de forma manual. De hecho, en la primera tanda caen dos bolas, que se introducen de inmediato en la semiesfera, sin esperar al bombo. Pero alguna más debió de despistarse que, en el último momento, con mucho disimulo algo va de mano en mano. El misterioso caso de la bola fantasma.

-Redacción-