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Son una de las sorpresas más temidas en las playas, las medusas. Pero este año, otro animal les ha robado el protagonismo. Se trata de los peces araña, también conocidos como fanecas, que se camuflan bajo la arena de la orilla. Este verano, se ha disparado el número de sus dolorosas picaduras. Hay que andarse con ojo porque se camuflan en primera línea de playa y suelen estar enterrados en la arena. Pero cuando los pisas, sus picaduras se asemejan a las de las medusas, aunque con una diferencia: duelen incluso más. A esta especie no se la ve fácilmente porque están enterradas y solo sacan el aguijón que tienen un poquito, por lo que, casi sin darnos cuenta, rozamos o pisamos a este pez, que este año ya ha picado a más de 700 personas en Galicia. De sus púas sale un veneno muy doloroso. Para prevenir este ataque lo recomendable es caminar con calzado para el agua, como las fanequeras. Si pese a las precauciones, las fanecas nos dan un susto hay que aplicar agua caliente y esperar unos minutos. Debemos limpiar la herida y si se agrava lo más aconsejable es acudir a un centro de salud.

-Redacción-