Unas palabras del líder de Vox, Santiago Abascal, sobre el diputado de Sumar, Gerardo Pisarello, acusándolo de “arrancar la bandera en un ayuntamiento, de odiar profundamente España y participar en un intento de romper la convivencia en nuestra patria”, provocaban que el aludido pidiese la palabra. Visiblemente enfadado Pisarello recordaba al líder de Vox sus orígenes de los que, aseguraba, está muy orgulloso. “Los que trabajamos y vivimos aquí no aceptamos ninguna lección de los que históricamente han vivido del cuento”, señalaba. El diputado de Sumar ha acusado además a los de Abascal de “formar parte de organizaciones históricamente islamófobas y antisemitas y de haber ido a rendir pleitesía al carnicero de Rafah”. Unas palabras que han provocado aplausos e insultos por parte de los diputados que han obligado a la presidenta del Congreso a poner orden.

- Redacción-