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Hoy vence el plazo para que una treintena de ex altos cargos de la Generalitat, entre ellos, Carles Puigdemont y Artur Mas, paguen las multas de más de 5 millones de euros que les impuso el Tribunal de Cuentas por promover el proceso independentista en el extranjero con dinero público. No han obtenido avales bancarios. Así que deberán hacer frente al pago con sus bienes.
El Govern no ha encontrado la fórmula para financiar las multas. Ningún banco avalará el fondo para pagar la fianza impuesta por el Tribunal de Cuentas. El president habla de "represión económica por actuaciones plenamente legales".El órgano fiscalizador les acusa de malversación de fondos públicos en la difusión del proceso independentista en el extranjero "el Tribunal de Cuentas es en este caso arte y parte", dice Aragonés, porque el mismo magistrado que investiga es el que decide que fianzas se aceptan y cuáles no.Ante la falta de aval, la mayoría de los encausados garantizarán la fianza con su patrimonio personal, a lo que se sumará el dinero recaudado en la llamada  'Caja de Solidaridad', que es de cerca de un millón de euros. "No vamos a seguir trabajando para encontrar soluciones en el marco de esta represión, que solo se va a solucionar de forma global con una amnistía", la que volverán a plantear en la mesa de diálogo que se abrirá en septiembre con el gobierno de Pedro Sánchez.

-Redacción-