Una guitarra eléctrica que el fallecido guitarrista George Harrison tocó en los primeros días de los Beatles a subasta en el mes de noviembre. Se espera que supere su precio estimado de 600.000 a 800.000 dólares. Comprada en una tienda de música en la ciudad natal de la banda, Liverpool, Harrison tocó la guitarra Futurama a principios de los años 60, cuando la banda actuó en el Cavern Club, realizó una gira por Alemania y grabó sus primeros discos oficiales para Polydor. Los subastadores dicen que la guitarra Futurama fue una de las que más tocó. La llaman "uno de los santos griales de las guitarras históricas de los Beatles". Para Harrison era "muy difícil" de tocar, pero le gustaba lo que llamó su aspecto "futurista". En 1964, donó el instrumento a una revista de rock como premio de un concurso, pero el ganador optó por un premio en efectivo y la guitarra la guardó el editor de la publicación.

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