El temporal que afecta al Levante español está dejando lluvias intensas y persistentes, especialmente en la Comunidad Valenciana. En Castellón, las precipitaciones han sido especialmente fuertes, con acumulaciones de más de 200 litros por metro cuadrado en algunas zonas, la mitad de esa cantidad en tan solo dos horas. Las fuertes lluvias han provocado inundaciones en carreteras y autovías, formando grandes balsas de agua que dificultan la circulación. Ante esta situación, se han abierto las compuertas de la presa del Regajo para controlar el caudal de los ríos y prevenir desbordamientos.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) mantiene la alerta naranja en casi toda la Comunidad Valenciana, y se ha activado una alerta roja en cerca de 50 municipios de la región. Los vecinos de las zonas afectadas muestran su preocupación y miedo ante la posibilidad de que se repitan los devastadores efectos de la DANA del pasado 29 de octubre. En localidades como Buñol y Chiva, los residentes observan con temor los cauces de los ríos y barrancos, conscientes del poder destructivo del agua. Algunos habitantes han optado por abandonar sus hogares por precaución, mientras otros se preparan colocando sacos terreros y resignándose ante la situación. El recuerdo de la anterior DANA sigue muy presente en la memoria de los afectados, que aún intentan recuperarse de los daños causados. Las autoridades instan a la población a mantenerse alerta y seguir las recomendaciones de seguridad ante la persistencia de las lluvias en las próximas horas.