El autobús circulaba por la calzada central de la Avenida Diagonal, pero al cruzar esta intersección y el paso de cebra, en lugar de frenar, embistió violentamente al otro autobús que estaba en la parada. "Parece ser que pasaba un peatón, entonces para esquivar el peatón pues tuvo que hacer virguerías y se empotró encima del otro", apunta un testigo. Esta la principal hipótesis: el accidente lo provocó supuestamente un peatón que cruzaba por donde no debía y sería uno de cuatro heridos críticos. El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, asegura que "efectivamente hay un peatón que está involucrado y está hospitalizado". La fuerza del choque provocó que uno de los autocares se estrellara contra un árbol y una farola, dejando más de medio centenar de heridos. Muchos fueron atendidos en la clínica dental de Meritxell Badia. "Vimos a mucha gente gritando, ensangrentada, y abrimos las puertas de la clínica para que pudieran pasar", puntualiza. El autobús que estaba parado iba lleno de cruceristas y, en el otro, estudiantes italianos de viaje de fin de curso. "Tenemos un odontólogo que es de Italia y él nos ayudó a tranquilizarlos", explica Ana Perea, responsable de administración de la clínica. Hoy la parada ha retomado su frenética actividad todavía con los signos visibles del fatal accidente.

-Redacción-