Atlas agencia

El 12J será, sin duda, insólito. Más parecido a lo que vimos, hace dos días, en las municipales de Francia. Mascarillas obligatorias, geles desinfectantes, marcas en el suelo para garantizar unas distancias que tendrán que mantener, también, los miembros de las mesas quienes, por cierto, no tocarán ni el DNI, ni el sobre. Serán los votantes quienes lo depositen en la urna. Eso sí, no veremos mamparas protectoras ni en Galicia, ni en el País Vasco, pero el mobiliario se limpiará durante toda la jornada. Garantizar la seguridad es el objetivo de las autoridades en unas elecciones en tiempos de coronavirus en las que, todo apunta, el voto por correo, influye también el verano, será protagonista. Por 8 se han multiplicado las peticiones en Euskadi y en Galicia ha aumentado hasta un 50 por ciento. El plazo para solicitarlo finaliza el jueves. Unos comicios autonómicos que dejan en la ciudad de Vigo un dato nunca visto: más de 180 personas han renunciado a estar en las mesas y mañana tendrán que celebrar un pleno extraordinario para volver a hacer un nuevo sorteo. 

-Redacción-