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Han pasado sólo dos días. "En el momento que yo considere oportuno tomaré una decisión", decía Manuel Chaves el jueves. Y el momento ya ha llegado. En política desde 1968. Cargo público desde el 77... Anoche, en una entrevista en la radio, anunció su adiós. "No voy a continuar como diputado en el Congreso de los Diputados". Y asegura que no. "No, no lo dejo por el caso de los ERE". Que su situación procesal no ha influido.
"Aunque me exoneren de la situación judicial en la que me encuentro, no voy a repetir". Ni por presiones de ningún tipo. "Nadie del partido, de la dirección nacional o de la dirección regional, me ha forzado ni me ha presionado". Por mucho que haya coincidido con la negociación para la investidura de Susana Díaz. "Yo no sé si lo mío va a facilitar o no va a facilitar la negociación. No lo sé. Pero no tomo esta decisión para facilitar eso". Su despedida... "Espero salir de la política bien". Ha sido justo después de la de su sucesor, José Antonio Griñán. Cabezas que pedían Podemos. "Lo importante es que se reconozca la responsabilidad política", afirmaba Teresa Rodríguez. Y Ciudadanos. Que quiere el compromiso por escrito. "Y por escrito significa que esas cosas, pasen hoy o pasen mañana, tendrán que estar por escrito. No basta con decirlo. Hay que hacerlo", comentaba Albert Rivera. "Si eso pasa", añadía, "ya habremos conseguido más que el Partido Popular en 30 años en Andalucía, que no ha hecho nada en la oposición". El presidente de Ciudadanos será el que refrende en última instancia lo que decidan sus diputados andaluces. La idea, cerrar un pacto anticorrupción para sentarse a hablar de todo lo demás.

-Redacción-