Su cara lo dice todo, entra en su nueva vivienda, 54 metros cuadrados para ella son un verdadero palacio. Nunca ha tenido ni siquiera una habitación propia. Con 27 años seguía en casa. 700 euros de nómina, contrato a media jornada. Impensable independizarse y menos en Cádiz. El alquiler turístico en la ciudad ha disparado los precios. María también vive con su madre. Ahora gracias a esta promoción de viviendas de protección oficial, 60 pisos, su día a día va a cambiar. Metro en mano, ellos también empiezan de cero. Donde antes vivían es ahora un piso turístico. Pero tras 10 años en lista de espera, por fin las dos palabras más repetidas para todos ellos. Que hoy se convierten en inquilinos.

-Redacción-